viernes, 9 de marzo de 2012

Amarillos causa daños premeditados en propiedad pública jerezana


¡¡INTOLERABLE!!:

Urbanos Amarillos agrede y desprecia al pueblo de Jerez destruyendo premeditadamente una propiedad pública jerezana

Un nuevo incidente protagonizado por la dirección de Los Amarillos y ocurrido durante la mañana de hoy ha venido a agravar aún más si cabe el progresivo deterioro de las calamitosas condiciones de trabajo de los autobuses urbanos de Jerez. En concreto, el suceso ha consistido en la comisión premeditada de daños de muy elevada importancia --siguiendo instrucciones concretas de las gerencias de Urbanos Amarillos en Jerez y Los Amarillos en Dos Hermanas-- a uno de los autobuses de color rosa (de propiedad municipal jerezana) de la mermada y casi ruinosa flota de autobuses de la ciudad.






El incidente dio comienzo a primera hora de la mañana cuando el autobús nº 69, un Mercedes Cítaro, que debía prestar servicios mínimos durante la indefinida que está llevando a cabo la plantilla en demanda de sus salarios y de mejoras en el servicio, resultó averiado en las mismas puertas de las cocheras de estos vehículos, impidiendo así la salida del resto de los servicios. El tren de aire delantero del autobús 69 perdió toda su presión por fallas probablemente en las válvulas, imposibilitando así la apertura y cierres de puertas y la elevación y arrodillamiento del vehículo y bloqueando su dirección. Además, la avería se vio empeorada porque, simultáneamente, el tren trasero del mismo vehículo registraba un bloqueo de ruedas por exceso de presión de aire en los frenos.

Este tipo de anomalías en el funcionamiento mecánico de los autobuses debieran ser infrecuentes en situaciones normales de mantenimiento, durante la gestión cotidiana de una flota ordinaria de autobuses urbanos. Sin embargo, se prodigan con muchísima frecuencia durante la circulación de los vehículos jerezanos, ya que de forma premeditada la Dirección de Urbanos Amarillos no ha procedido a la compra de vehículos nuevos, haciendo caso omiso del Pliego de Condiciones y del Contrato en vigor con el Ayuntamiento de la ciudad y provocando que la edad real de más de 15 autobuses en servicio (Mercedes 404) supere los 17 años y la edad media de la flota se sitúe en torno a los 10 años. Dado que el criterio de la Dirección de Los Amarillos a la hora de adoptar estos recortes es economicista, también ha procedido a anular los mantenimientos y controles preventivos, no reponer piezas, no pasar ITV, no reparar averías, etc., etc., incrementando enormemente la peligrosidad para los viajeros y el riesgo de siniestrabilidad con daños a personas. Y todo ello, dentro del marco general de incumplimientos punibles del Pliego, que han llevado a la empresa a una perpetua condición de precariedad, conflictos y huelgas, puesto que Los Amarillos no abonan nóminas, no entregan uniformes, no facilitan EPIs, no paga el canon estipulado, etc.

Pues bien, como la reparación de la avería matutina del bus 69 se prolongaba ya que la empresa no había asignado un mecánico a los servicios mínimos, la Dirección de Amarillos solicitó la asistencia de un mecánico del concesionario Mercedes en la ciudad (Cadimar) y de un operario y vehículo auxiliar de la empresa Grúas Oliva. Dado que la intervención de ambos especialistas durante más de 3 horas no logró desbloquear y recuperar el autobús --indicio del penoso estado mecánico al que le ha conducido el abandono negligente de la empresa--, los operarios externos recomendaron que el autobús fuera introducido marcha atrás en el interior de las cocheras, para proceder con más detenimiento y en días sucesivos a su reparación. Sin embargo y siguiendo instrucciones concretas de la dirección de Los Amarillos de Sevilla, la Dirección de Jerez ordenó el traslado del vehículo a las instalaciones del concesionario de Mercedes. Este traslado fue desaconsejado por el operario y la gerencia de la empresa de Grúas ya que, según indicaron a Los Amarillos, el vehículo se encontraba en terreno inclinado y la tracción iba a ocasionar grandes daños en el autobús por la colisión de sus frontales y laterales con elementos del brazo articulado elevador o “cuchara” de la grúa y de sus defensas. Pero, a pesar de esta prudente y experta advertencia, la Dirección de Los Amarillos hizo caso omiso de la misma ordenando por escrito ("Autorizo a remolcarlo con todas las consecuencias") el traslado forzoso e inmediato del vehículo independientemente de los daños que pudiera sufrir.



Atendiendo a este requerimiento y para asombro y escándalo de los presentes, entre ellos una dotación completa de 4 agentes de la Policía Nacional, el autobús comenzó a ser remolcado, sufriendo (tal como se había venido vaticinando de palabra y por escrito) numerosos y muy importantes daños, tales como destrozos del eje y dirección del autobús, además de la rotura de las defensas, faros, carrocería y lunas lateral y delantera, así como el lesivo arrastre del fondo, caja de cambios y eje trasero del vehículo por todas las avenidas del Polígono Industrial El Portal, sede de los autobuses de Jerez.














En resumen, el incidente debe interpretarse como un intolerable, imprudente y temerario acto de desprecio y agresión de Los Amarillos y Urbanos Amarillos contra el Ayuntamiento, el Pueblo y la plantilla del servicio en Jerez, al destruir premeditadamente un vehículo cuya titularidad y propiedad es pública, ya que pertenece a la ciudad de Jerez y no a la empresa Urbanos Amarillos.

Por todo ello y en consecuencia, la Coordinadora en Defensa del Transporte Público Urbano y Rural de Jerez reitera su exigencia de resolución del contrato municipal con Los Amarillos, mientras se encuentra a la espera de la postura que en relación a estos gravísimos incidentes deben adoptar la Alcaldesa y los Concejales de Urbanismo y Movilidad del Ayuntamiento, reservándose esta Coordinadora el derecho a emprender acciones legales contra los intervinientes en la causa, de la cual se dispone de numerosas pruebas gráficas y audiovisuales en forma de copias de documentos, fotografías y videos.

Imágenes propiedad de varios autores (Mick Clavijo y otros)

5 comentarios:

  1. Lo que no entiendo,es porqué no hicieron caso delo que los operarios aconsejaban,es mas ,el gruista tenía orden de su jefe de no utilizar el brazo articulado,ya que él, no se haría responsable de los daños que seguro ocasionaría.

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  2. Probablemente, pretendían llevarse el autobús a Cadimar para que allí un perito de Mercedes autentificara --sí o sí-- que los sistemas del 69 habían sido manipulados para no andar y así poder justificar una posible sanción al conductor del bus o a cualquiera que se hubiera acercado al vehículo, con objeto (posteriormente) de poner la quita de esa sanción en la mesa de negociación del final de la huelga. Y seguramente pensaban que si el bus 69 hubiera permanecido en el garaje no habrían podido detectar las huellas o pistas de la supuesta manipulación. En cualquier caso, tanto si existen razones como si no, siempre estamos hablando de comportamientos paranoides, que revelan mucho de la mente enfermiza, insegura y agresiva de alguno de los jefes de Los Amarillos.

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  3. Esa gente están chaladas ese autobus en la actualidad debe de estar en el desguace

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    1. El otro día se le cayó el techo y menos mal que no había nadie

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